Por supuesto que hablamos del tiempo, de “Matar el Tiempo” de esa situación tan incómoda de tener que esperar y esperar, hay varias soluciones y una de ellas es ejercitarnos.
Mucho se dice en los diferentes medios que debemos activarnos, que debemos ejercitarnos, que nuestra vida no debe ser demasiado sedentaria, y toda una serie de comentarios respecto al ejercicio y la salud. Sin embargo hay días en que por muy convencidos que estemos de que debemos movernos, resulta del todo imposible hacerlo debido a muy diversos factores como el hecho de tener que esperar para todo en el día a día.
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Tal es el caso de los aeropuertos cuando por motivos de seguridad hay que llegar varias horas antes del vuelo para pasar los puestos de revisión de seguridad, eso sin contar con los retrasos. Lo mismo sucede en el banco, el supermercado, el tráfico, la llegada del tren o el autobús en que nos vamos a trasladar, las horas que dura el trayecto de un sitio a otro, la espera en el auto mientras los niños salen de la escuela, en fin, todo es esperar y esperar y esperar.
Realmente puede llegar a ser espeluznante, sobre todo si sumamos los minutos o las horas a la semana que pasamos esperando por algo y nos damos cuenta de que pueden llegar a ser muchas horas desperdiciadas.
Ante semejantes circunstancias es muy posible que se tengan accesos de impaciencia, ansiedad, irritabilidad, nerviosismo, estrés, etc.
En la mayoría de los casos no podemos hacer absolutamente nada por acelerar los procesos y no hay más remedio que seguir esperando. Lo que sí podemos hacer es usar un poco la creatividad para aprovechar esos momentos, cortos o largos para hacer algo que nos guste, nos divierta y que nos sea de provecho.
Algunas personas escuchan música o juegan en dispositivos portátiles pero esto es algo que no en todos los lugares está permitido, eso sin contar el ruido exterior, los problemas de conexión o la duración de la carga de los dispositivos. Algunas otras personas leen aunque el hábito de la lectura se ha ido perdiendo y por otro lado el medio no siempre permite concentrarse en la lectura.
Algunas más conversan entre sí pero por seguridad no siempre es prudente hacerlo, en fin, todo lo anterior puede ayudar un poco para pasar el tiempo pero son ocupaciones sedentarias salvo en algunos casos en los que es posible caminar un poco en el lugar.
Una solución para canalizar el estrés que causa la engorrosa espera, y al mismo tiempo contribuir a nuestro bienestar físico es el uso de pequeños ejercitadores manuales como el NSD Spinner o de algún otro objeto que tengamos en el bolsillo. En lugar de terminar desesperados, enfadados o mordiéndonos las uñas podríamos aprovechar el tiempo de espera realizando algunos juegos o ejercicio de coordinación manual.
Esto, al mismo tiempo que sirve como válvula de escape al estrés nos puede ayudar a conservar la movilidad, la flexibilidad, la fuerza, la coordinación neuromuscular, etc.
La solución a la adivinanza es: el tiempo.
Algo tan sencillo como tener en la mano una pequeña pelota de goma, una moneda, ligas, una pluma, etc., y juguetear con el objeto tratando de hacer algún truco, girándolo, pasándolo de un dedo a otro o en el caso de las pelotas apretando y aflojando de distintas formas puede ayudarnos enormemente a controlar la situación al mismo tiempo que obtenemos beneficios no solo a nivel dedos, manos y brazos sino también a nivel cerebral y emocional.
